Por todo lo anterior, sostenemos que el estudio del patrimonio urbano y arquitectónico debe abordarse desde un enfoque interdisciplinario, ya que sólo así se pueden comprender las variadas facetas de un objeto de investigación tan complejo como éste, en el que se imbrican elementos históricos, artísticos y culturales que no sólo configuran un efecto estético, sino que también posibilitan el uso de los espacios y sus elementos en un devenir de continuo cambio.

Como resultado, este repertorio bibliográfico tendrá un impacto positivo en la investigación y divulgación del patrimonio edificado de México, ya que persigue los siguientes fines:

  1. Contribuir al rescate de la memoria intelectual y colectiva de los bienes descritos.
  2. Despertar la atención de los estudiosos y defensores del patrimonio sobre aquellos vestigios que aún no han sido rescatados y, sobre todo, de los que se encuentran en estado de abandono, ruina y devastación.
  3. Ofrecer un inventario de obras que sirva como guía informativa para su plataforma y quehacer político, promoviendo así la defensa legal de los bienes tangibles del pasado.
  4. Mediante una valoración de sus fuentes y con el apoyo de estudios bibliométricos, explicar cuándo cobra vigencia esta temática en México y quiénes son sus pensadores y promotores editoriales.

De todo esto concluimos que es vital la difusión de esta bibliografía a través de un soporte de comunicación amplio y económico como Internet, o mediante los sitios web de las instituciones involucradas con la cultura y salvaguarda del patrimonio, con el objetivo de que pueda ser consultada por historiadores, urbanistas, arquitectos, restauradores, ingenieros, topógrafos, etnógrafos, escultores, además de conservacionistas interesados en la protección de los bienes patrimoniales, vinculados a instituciones educativas y culturales (como el INAH o el INBAL) o a organismos civiles, tanto nacionales como internacionales (por ejemplo ICOMOS).